En las playas de Portobelo, lo que hoy es Panam??, atrac?? el gale??n San Jos??. Apenas empezaba el a??o 1708. La embarcaci??n y cerca de 600 personas a bordo ven??an desde Espa??a, con direcci??n a Cartagena, pues el nav??o, que solo era usado para la guerra o transportar mercanc??a, recoger??a objetos del Nuevo Mundo. La tripulaci??n se detuvo
en la Feria de Portobelo, el principal escenario de intercambios comerciales entre Espa??a y el Virreinato de Per??.
Seg??n la historia, recogieron un ???tesoro??? valorado hoy en 20.000 millones de d??lares, para entregarlo al rey Felipe V.
Sab??an que hab??a riesgo de un ataque por parte de tropas brit??nicas. De vuelta a Cartagena, la embarcaci??n fue asaltada por la escuadra corsaria
del comandante brit??nico Charles Wager, lo que termin?? con el naufragio del gale??n cerca de las costas colombianas.
El paradero del gale??n San Jos?? pas?? de ser un misterio que movi?? la curiosidad de reinados y
pa??ses por 300 a??os a una historia
que ha revelado datos sobre la relaci??n de la corona espa??ola con el territorio y que ha motivado
una rigurosa investigaci??n desde el 2015, cuando se hallaron sus restos.
En torno a este yacimiento han surgido preguntas por parte de investigadores y las principales dudas empiezan con un: ??por qu??? Lo que ha llevado a cient??ficos colombianos a indagar sobre su hundimiento, el impacto que tiene el gale??n en la historia colombiana, entre otros datos que parecen reveladores.
En la ??ltima d??cada, el Gobierno ha dispuesto un equipo multidisciplinar que determin?? que el barco cargaba oro, porcelana, esmeraldas, plata y otros elementos. Sin embargo, la investigaci??n no hab??a llegado al punto de necesitar la recolecci??n de objetos,
hasta este 19 de noviembre, cuando se recuperaron por primera vez algunas de las piezas.
???Para hacer este procedimiento se tienen que seguir protocolos y criterios de m??ltiples dimensiones. Nosotros solo quer??amos recuperar lo superficial.
Nada que estuviera enterrado, tampoco que estuviera en el centro del yacimiento. Seguimos los criterios t??cnicos, historiogr??ficos y m??s
???, dice a EL TIEMPO Alhena Caicedo, directora del Instituto Colombiano de Antropolog??a e Historia (Icanh).
Galeon San Jose
Foto:
Presidencia
Un ca????n, tres monedas y una taza de porcelana fueron escogidos rigurosamente por un equipo de investigadores del Ministerio de Defensa, el Ministerio de Cultura, la Armada de Colombia, la Dimar y el Icanh.
Esto, como la segunda parte de la investigaci??n ???Hacia el coraz??n del Gale??n San Jos?????, que tiene como objetivo determinar los procesos de formaci??n
y degradaci??n del pecio, salvaguardar su patrimonio arqueol??gico y generar conocimiento cient??fico y cultural.
La primera fase de esta iniciativa fue un estudio no intrusivo, que ha ayudado a entender en d??nde est??n los objetos que viajaban en el barco y los restos de su infraestructura, con el objetivo de delimitar el ??rea del sitio e identificar el deterioro en los materiales. Para la segunda etapa ???que est?? en curso??? es necesario analizar los elementos arqueol??gicos, lo que implica recolectarlos, adaptarlos gradualmente al entorno terrestre y conservarlos en ??ptimas condiciones. Por ello, las piezas fueron trasladadas al Centro de Investigaciones Oceanogr??ficas e Hidrogr??ficas de la Direcci??n General Mar??tima (Dimar), en Cartagena.
All??, est??n en estabilizaci??n para evitar que el cambio de entorno degrade su estructura y composici??n.
???En los laboratorios de conservaci??n se estabilizan los materiales que han estado expuestos a condiciones extremas por, al menos, 300 a??os, que han estado a m??s de 600 metros de profundidad, lo que equivale a un buen n??mero de atm??sferas y un peso muy importante. Los art??culos tambi??n han estado resguardados de la luz y el ox??geno, y a temperaturas baj??simas, pues existe la posibilidad de que los materiales se deterioren al cambiar las condiciones. Adem??s, la mayor??a de investigaciones de esta ??ndole se hacen en otras latitudes. Por eso, los equipos t??cnicos de conservaci??n del Ministerio de Cultura son novedos??simos???, cuenta Caicedo.
Las primeras conclusiones a las que el Icanh lleg??, una vez los art??culos estuvieron en tierra, son: el ca????n fue fabricado mucho antes del naufragio, es decir, en el a??o 1654;
tiene marcas, que no se hab??an podido ver a trav??s de las fotograf??as; y sus insignias son del reinado del rey Felipe.
Por su parte, las monedas tienen un sello del imperio espa??ol y fueron acu??adas en 1707, un a??o antes del naufragio. Tambi??n se sabe que fueron dise??adas para circular por fuera de la pen??nsula ib??rica. Son de 8 escudos, que era la denominaci??n m??s alta del momento. Adem??s, est??n hechas con aleaciones de metales, ???entre ellos plata que probablemente era de Bolivia, Per??, Potos??, y oro recolectado con mano esclavizada, buena parte proveniente de minas del Cauca o de Antioquia???, dice Andr??s L??pez, historiador y polit??logo.
Imagen de una de las exploraciones de la Armada Nacional al sitio donde est?? el Gale??n San Jos??.
Foto:
Armada Nacional
Sin embargo, para el experto, lo m??s llamativo puede ser la taza. ???Ser?? un objeto particularmente importante porque la comercializaci??n de bienes con el Pac??fico, con Filipinas, China, Jap??n, en 1708,
estaba muy regulada por la corona espa??ola. Solo se pod??a comerciar directamente con Asia a trav??s de Acapulco, en el virreinato de Nueva Espa??a.
Y encontramos este objeto en una embarcaci??n que parte de Panam?? y se hunde en el Caribe colombiano. Es decir, que estamos hablando de una historia de contrabando???, comenta a EL TIEMPO.
Con una investigaci??n m??s profunda, las autoridades esperan descubrir datos que cambiar??an la historia que se conoce del gale??n. ???Generalmente, la historiograf??a funciona as??: cuando hay nuevas fuentes de informaci??n, sean documentales o materiales, las interpretaciones est??n sujetas a cambio, por ello, creemos que estos objetos tambi??n nos podr??n ayudar a orientar mejor las hip??tesis con las que se ha investigado. Sin duda, estas evidencias nos permitir??n comprender mejor las causas del hundimiento del gale??n San Jos??.
Existen varias teor??as, entre ellas la explosi??n como posible motivo del naufragio. Estas evidencias materiales abren la posibilidad a nuevas interpretaciones y registros, ofreciendo la oportunidad de contar la historia
desde otras perspectivas???, cuenta a EL TIEMPO la ministra de las Culturas, Yannai Kadamani.
Aunque con la investigaci??n se espera llegar a m??s detalles sobre la ??poca colonial, lo que dice la historia de ese entonces ya es bastante revelador. El gale??n hizo parte de un sistema de comunicaci??n y comercio fundamental, que fue central en la historia de la Carrera de Indias, que era un sistema espa??ol de comunicaci??n entre Europa y Am??rica que dur?? por lo menos cuatro siglos. El ???San Jos????? era una embarcaci??n novedosa, creada espec??ficamente a partir de modelos del mundo mediterr??neo y europeo, y adaptada para dicho fin.
Gale??n San Jos??
Foto:
archivo particular
Otro de los hechos que hacen tan importante el hallazgo de esta embarcaci??n es que es la puerta de entrada a un mundo desconocido de naufragios y de reliquias arqueol??gicas sumergidas que ha sido inexplorado. De hecho, los historiadores calculan que debe haber, al menos, 100 embarcaciones m??s similares al gale??n,
es decir, que pertenecen al periodo colonial y republicano, hundidas tanto en el Caribe como en el Pac??fico, incluyendo el territorio insular de San Andr??s y Santa Catalina.
???En Colombia hab??amos olvidado nuestro territorio mar??timo. La mitad del pa??s es mar, en el Caribe y el Pac??fico. Este cap??tulo es apenas uno de por lo menos cien m??s, donde todav??a tenemos un reto como sociedad para entender cu??les son esas otras historias sumergidas en el olvido y en el mar???, explica L??pez.
Los ojos sobre el gale??n
Haber encontrado esta nave, con una eslora de 40,85 metros y una manga de 12,53 metros, ha sido llamativo porque desde hace m??s de 300 a??os se han buscado sus restos. Lo que cuenta Juan Felipe P??rez, antrop??logo e investigador en temas de comercio colonial y naufragios, integrante de la Red Universitaria de Patrimonio Cultural Sumergido, es que desde el momento del naufragio la corona espa??ola cre?? empresas rescatistas para intentar recuperarlo. ???
Nunca lo lograron, en parte porque est?? muy profundo y porque la explosi??n dispers?? sus restos.
Despu??s de la independencia, otras personas siguieron busc??ndolo. Lo del 2015 se presenta como el hallazgo???, agrega.
Aunque desde ese a??o las autoridades colombianas han asegurado que el pecio hallado es el gale??n San Jos??, P??rez considera que a??n faltan pruebas que permitan afirmar que efectivamente se trata de ese nav??o y no de otra embarcaci??n. ???No hay pruebas concretas. El Gobierno insiste en que es el San Jos??, pero no ha mostrado u
na evidencia contundente que lo confirme. Se ha vendido al mundo el ???descubrimiento del San Jos????? sin mostrar la prueba principal
???, se??ala.
M??s all?? de esa discusi??n, el investigador cuestiona el hecho de que el Gobierno sostenga que el gale??n San Jos?? es el sitio arqueol??gico m??s importante del pa??s, y el entonces presidente Juan Manuel Santos incluso lleg?? a afirmar que era el m??s importante de la humanidad,
lo que para P??rez abre preguntas como: ?????Por qu?? el sitio arqueol??gico m??s importante del pa??s tendr??a que ser una embarcaci??n europea
hundida en una batalla entre potencias europeas? ??Por qu?? Colombia tendr??a que liderar la exploraci??n de un patrimonio que no es propio culturalmente????. ??l ve esto como un factor que genera desigualdad frente a otros yacimientos terrestres o de otras ??pocas, pues se ha creado una categor??a jur??dica especial para el patrimonio cultural sumergido, muy orientada a naufragios coloniales con posibles tesoros.
El gale??n San Jos?? fue hundido en el mar caribe.
Foto:
Ministerio de Cultura
???Hay vestigios de embarcaciones abor??genes sin oro ni plata; hay sitios que documentan las primeras movilizaciones humanas en el continente; hay evidencias de ciudades y poblamientos antiguos en r??os, lagunas, Pac??fico y Caribe. Pero casi no se les presta atenci??n porque toda la obsesi??n ha estado en encontrar el gale??n San Jos?? y sus supuestos tesoros. Esa obsesi??n ha movido leyes, programas acad??micos y recursos enormes???, expresa P??rez.
La atenci??n que se le ha dado a nivel nacional tambi??n ha puesto los ojos de ???busca tesoros??? y del Gobierno espa??ol en los restos de la embarcaci??n, que han sido avaluados en 20.000 millones de d??lares. Inicialmente,
la empresa estadounidense Sea Search Armada reclam?? judicialmente el 50 % del valor de lo que a??n contiene la nave, argumentando que hab??an encontrado
el lugar del naufragio hace cuatro d??cadas. Al respecto, las autoridades colombianas han aclarado que este es un patrimonio arqueol??gico y no un tesoro. Asimismo, han desestimado el reclamo, indicando que la localizaci??n que se??alan los estadounidenses es err??nea y que, de hecho, las coordenadas reales se mantienen resguardadas como un secreto de Estado. En la actualidad, en un tribunal arbitral internacional est?? pendiente un laudo sobre este tema.
???Durante mucho tiempo se ha cre??do que los objetos en el mar son tesoros sin due??o y que, tras un naufragio, quedan en un limbo jur??dico. Esa idea alimenta el inter??s por rescatarlos, como si pudieran apropiarse de ellos. Pero existen normas ambientales, jur??dicas y marinas que lo impiden: todo rescate arqueol??gico debe seguir reglas claras.
Cuando no se respetan, surgen disputas entre pa??ses sobre si lo hallado pertenece al lugar del hallazgo o al pa??s cuyo pabell??n llevaba la embarcaci??n
???, explica P??rez.
Luego aparecieron Roger Dooley y Espa??a. El primero es un estadounidense que tuvo negociaciones con el gobierno de Juan Manuel Santos. Fue con ??l que se localizaron los restos arqueol??gicos que se investigan hoy. En todos estos procesos, el Gobierno colombiano ???a trav??s de Dimar, la Armada, el Ministerio de Cultura y el Icanh??? aval?? investigaciones de entidades externas para localizar estos naufragios. Tras eso, el pa??s ib??rico inici?? un proceso para reclamar como suyos los objetos que a??n quedan del hundimiento. Sus argumentos para lograr su cometido se basan en que Colombia, como pa??s, no estaba conformado cuando ocurri?? el naufragio, sino que era parte del Reino de Espa??a.
???Muchos pa??ses han ratificado las normas de la Unesco sobre patrimonio cultural subacu??tico. Ah?? se habla de conservaci??n in situ, de respeto por las embarcaciones y altos est??ndares ??ticos para cualquier extracci??n. Las naciones suelen apelar a la Unesco o a cortes internacionales. Colombia no ha ratificado esa convenci??n. En cambio, ha creado una normativa interna ???muy pol??mica y politizada???
para afirmar que todo lo que se encuentre en aguas bajo jurisdicci??n colombiana es patrimonio cultural colombiano, salvo que Colombia decida acordar algo con otros pa??ses. Es una forma de blindarse
???, puntualiza P??rez.
Luego de que se culmine la segunda etapa del proyecto, se busca mostrar los elementos al p??blico general. ???Ojal?? tengamos la posibilidad de construir un museo del gale??n San Jos?? en la ciudad de Cartagena, siempre ha sido una de las metas del proyecto???, concluye la ministra Kadamani.??